La infancia no se toca
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La infancia no se toca

La infancia no se toca

La infancia no se toca. Una página de formación de familias ha publicado un artículo que titula, ‘hay centros escolares que todavía no son espacios seguros para la infancia y adolescencia no binaria’. 

  • ¿Existen las personas no binarias? 
  • ¿A qué se refieren cuando hablan de niñes?
  • ¿Y, cuando hablan de hijes no binaries?

Madre mía, cuánta palabrería superficial posmoderna. Deberían empezar el artículo explicado cada nuevo vocablo. 

También deberían usar un lenguaje inclusivo, porque usar las palabras acabadas en ‘E’, no lo es.

Esta página tiene más de 100 mil seguidores, imaginad la confusión que están creando en tantas familias. 

Les están haciendo creer a los progenitores, que su hija o su hijo han nacido en un cuerpo equivocado, si no se ajustan a los estereotipos culturales, que marcan qué es de niña o de niño. 

  • Diagnosticar a un niño como niña, porque le encante jugar con las muñecas, pintarse las uñas o ponerse falda. 
  • O a una niña como niño, porque le gustan los pantalones anchos, el pelo corto y el fútbol, es machista y sexista.

Cuando, lo que tendrían que hacerles ver, es que, si no están conformes con el género que la sociedad les ha impuesto, por supuesto que no pasas nada y evidentemente, no tienen que intentar cambiar su sexo, no tienen que mutilarse, ni hormonarse.  

Estos mensajes acientíficos tan de moda, que afloran como setas, están haciendo un daño irreversible a nuestros menores y tiene gravísimas consecuencias para su salud física, sexual y mental.

La infancia no se toca

No podemos negar el sexo biológico.

En los humanos, como en la mayoría de animales y plantas, el sexo biológico corresponde a cada uno de los 2 tipos de anatomía destinada a la reproducción: masculina o femenina. No existe un tercer tipo de célula sexual en humanos y, por lo tanto, no hay un “espectro” de sexos, más allá del hombre y la mujer. 

Negar la realidad del sexo biológico y suplantarlo por una ‘identidad de género’ subjetiva no es simplemente una teoría académica acientífica, es algo que vulnera los derechos de mujeres, homosexuales, niñas y niños. 

La infancia no se toca

Tampoco existen cerebros femeninos o masculinos.

La identidad de género no reside en el cerebro. Está ampliamente demostrado que los cerebros de mujeres y hombres son prácticamente iguales. 

Defender lo contrario (algo que hace un conocido doctor en psicología con más de 100 seguidores), es como defender los tópicos sexistas de que a las mujeres nos cuesta más entender un mapa y que los hombres son menos empáticos porque viene ‘escrito’ en nuestro ADN. 

En la infancia, el comportamiento de ‘niña o niño’ es una etiqueta social aprendida e imitada de las personas del entorno.

La infancia no se toca

El desarrollo del cerebro no es lineal, no madura todo a la vez. Por tanto, en la infancia y adolescencia no se pueden tomar ciertas decisiones, porque el cerebro no está capacitado.

La maduración del cerebro se produce como las obras de remodelación de una casa, en las que cada gremio trabaja, en un momento diferente: 

  • La primera zona en madurar es la posterior, la más primitiva. 
  • La última parte en madurar es la corteza prefrontal, situada en la parte anterior, y encargada de las funciones ejecutivas más complejas, como el razonamiento, la reflexión, la toma de decisiones o la valoración de las consecuencias de un acto concreto.

Sin embargo, esa zona no alcanza su madurez hasta los 25 años aproximadamente. 

Eso quiere decir que, un menor de 5, 10 o 15 años, no está en condiciones de tomar decisiones RELEVANTES E IRREVERSIBLES sobre su identidad.

Es absolutamente sorprendente que se nos quiera hacer creer, que un menor es capaz de reflexionar (sobre si es o no trans), con un cerebro inmaduro y en construcción.

¿Qué hacer en el caso de que dudaran sobre su identidad?

En el caso de que ocurriera, lo que tenemos que hacer es:

  • Supervisarlos
  • Protegerlos
  • Aceptarlos y,
  • Quererlos como son

Y dejar que desarrollen sus características sin mutilarlos, hormonarlos, ni etiquetarlos.

La infancia no se toca. 

Vídeo YouTube: AQUÍ

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